Panteón de Goya

Está situado en la ermita de San Antonio de la Florida , a los pies del presbiterio. La tumba del pintor está realizada en granito y tiene adosada la lápida de piedra caliza que señalaba su sepultura en el cementerio de Burdeos, donde murió en 1828. Más tarde sus restos fueron trasladados a España y en 1919 recibieron sepultura en esta capilla, elegida como el lugar idóneo para su panteón. De hecho, el templo fue pintado por el propio Goya. Sobresalen las pinturas al fresco de la cúpula, donde se representa la escena del “milagro de San Antonio”, así como la apoteosis de los ángeles, en las pechinas de la iglesia.